jueves, 26 de octubre de 2017

Creepypasta: el ascensor de la muerte

¿Por qué se me ocurrió subir por este ascensor, aun sabiendo que la gente desaparecía tras entrar en él? Bueno, como se suele decir, la curiosidad mató al gato, pero el gato murió sabiendo. Bueno, os contaré como es que me encuentro en esta situación. Hoy había ido al trabajo como cada día. Como siempre hablaba con mis compañeros mientras organizábamos todos los papeles que nos llegaban. No me podía quejar la verdad, tenía trabajo, un sueldo perfecto, una novia a la que quería demasiado, familia, amigos y una casa bastante grande, por lo que vivía de lujo.
- Oye Yulien, ¿qué tal con Sora? -preguntó uno de mis compañeros con una sonrisa pícara.
- Pues muy bien la verdad, incluso estoy pensando en pedirle mano pero, no sé cómo hacerlo la verdad -dije algo sonrojado.
- Pues tío, invítala a las recreativas y, mientras jugáis a lo que sea, se la pides -propuso otro de mis compañeros.
- Jum, pues no es mala idea la idea la verdad -dije pensativo.- está bien, haré eso.
- Buena suerte tío, estamos contigo -dijo la secretaria.
Se lo agradecí a todos y, tras terminar el trabajo, me dirigí a casa de mi amada para preguntarle si podía quedar hoy. Pero no contestaba, algo extraño en ella ya que siempre abría rápido. Tras unos minutos sin contestar, decidí tirar la puerta abajo, pero me di cuenta de que la puerta estaba abierta. Temiendo lo peor, entré en la casa y me puse a buscar a Sora. Cuando llegué a su habitación, vi que había una nota sobre la mesa. En esta ponía:
"Yulien, si lees esto, es que estaré de camino para el ascensor maldito. Si, ese ascensor que dicen que matan a las personas. Quiero comprobar el por qué ocurre esto. Por favor, no me busques, necesito hacer esto sola. Si no llego a volver recuerda que eres el ser que más amo en este mundo y jamás dejaré de quererte. 
Un beso, Sora."
¿Qué? Bueno, creo que eso de que en el ascensor es mentira, por lo que no me meteré en su camino si eso es lo que quiere. Eso fue lo que pensé en esos momentos. Me fui de la casa y me fui a la mía. Cuando ya eran las 19:00 de la noche la llamé para ver si estaba bien, pero ella no me lo cogía. La llamé una y otra vez pero siempre me decía que estaba fuera de señal. Cada vez me preocupaba más y más, por lo que decidí ir a buscarla a ese sitio. Al llegar al lugar del ascensor maldito, noté como un olorcillo a sangre. No....... Sora......... No no, seguro que es mi imaginación. Entré en el ascensor y le di al botón del último piso. Pero, al llegar al último piso, no se paró, sino que siguió avanzando hasta un piso que era imposible que existiera. Ahora estoy aquí, esperando mi destino. Cuando el ascensor decidió pararse, este se abrió y vi una escena muy perturbadora. En ese piso había un montón de cadáveres, algunos más recientes que otros. Y, ahí, en frente mío, vi el cuerpo de Sora muerto. No................ puede............................. Ser............................................. ¿quién.................. hizo esto.................................? De repente, vi como un señor no más mayor que yo apareció.
- ¿quién eres? -pregunté nervioso.
Este no dijo nada, solo colocó un trozo de tela sobre Sora. Tras eso, me miró con unos ojos que decían un lo siento. Yo, llorando, me abracé a él. No se el por qué, pero sentía que podía confiar en el.Tras un rato así, este me dio una nota que decía:

"Creo que deberíamos irnos. Este lugar es demasiado peligroso, sobre todo con ese asesino aquí. Me he encargado de ir sacando fotos de este lugar para que nos crean, incluso tengo un vídeo mostrando cada lugar de este sitio tan raro." 
Asentí y este me indicó que lo siguiera y así hice. Tras unos minutos caminando, escuchamos un ruido extraño, por lo que empezamos a correr cada vez más deprisa. Pero parece que nos sigue el paso como si nada y pareciera que nos iba a alcanzar pero, con suerte, llegamos a la parte que daba a la salida. Salimos por ahí y lo primero que vimos fue a un montón de policías. Fuimos con ellos para explicarles todo lo que había pasado pero el loco asesino salió para intentar matarnos a todos. Con suerte uno de los policías actuó rápido e hizo que cayera al suelo inconsciente gracias a una pistola eléctrica. Ambos, aliviados, nos miramos y sonreímos. El chico misterioso escribió algo en un papel y me lo dio. Este trozo decía lo siguiente:
"muchas gracias por ayudarme. Por cierto, no me he presentado, me llamo Ayato."
- Encantado Ayato, mi nombre es Yulien -dije sonriendo.
Ayato volvió a escribir algo en un papel.
"encantado igualmente Yulien."
Desde ese día, vivo con él y lo hacemos todo juntos. He de admitir que la muerte de Sora me entristeció, pero Ayato siempre está ahí para cuando me da una recaída. Cuando lo conocí hace ya tiempo, me dio algo de miedo, pero es su primera apariencia. Él es un amor de hombre, siempre atento a todo. También me cambié de trabajo y ahora somos investigadores de cosas paranormales que ocurren en la ciudad. Mis amigos me apoyaron en todo momento e incluso decidieron unirse a nosotros. Y, así, pasaré el resto de mis días, como un investigador de sucesos paranormales junto a mis amigos. Y, bueno, desde hace un tiempo empecé a sentir algo por Ayato y él por mí.

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